Una buena ventilación es una de las principales armas para luchar contra la Covid-19 en espacios interiores; de hecho, científicos e instituciones nacionales e internacionales ya han reconocido el importante papel de los aerosoles en el contagio de esta enfermedad. Y en los centros educativos se lleva todo el curso escolar tomando medidas para mejorar la ventilación de las aulas: sistemas de ventilación forzada, purificadores y, por supuesto, apertura de ventanas. Pero, ¿cuánto hay que abrirlas? ¿Cada cuánto tiempo?
Para saberlo, lo mejor es analizar la calidad del aire del interior de este y otros espacios; algo que se realiza fácilmente con un medidor de CO2: pequeños dispositivos como el Aranet 4 protagonista de este análisis que miden esta variable en tiempo real y ayudan a saber cuánto del aire que respiramos ha sido exhalado previamente por otra persona. A porcentajes más bajos, menos riesgo.
Fácil lectura
Aranet 4 es un medidor de CO2 con un tamaño muy compacto y un funcionamiento extremadamente sencillo, lo que hace que cualquier persona pueda utilizarlo y saber exactamente cómo es la calidad del aire de un solo vistazo.
Así, nada más poner las dos pilas con las que funciona, su pantalla se enciende y comienza a mostrar las mediciones. Tiene tecnología eInk (la misma que emplean los lectores de libros electrónicos), es monocromo y tiene un buen contraste, permitiendo la lectura de los datos de forma clara desde cualquier ángulo. En ella se muestra, en la parte superior, la temperatura y nivel de humedad, para dejar la zona central al nivel de CO2, en números mucho más grandes.
Justo debajo nos encontramos con tres barras que indican cómo es la calidad del aire: si se enciende la primera, identificada con un color verde, la concentración de CO2 se encuentra entre 420 y 999 ppm y es buena (eso supondría que el aire previamente respirado es entre un 0 y un 1% del total); en amarillo, entre 1.000 y 1.400 ppm y está en nivel medio; y en rojo, a partir de 1.400 ppm, el aire es insalubre y hay que aumentar la ventilación de manera inmediata.
Con app
Esto para ver las mediciones en tiempo real pero, si lo que se desea es realizar un seguimiento más exhaustivo, hay que vincular el dispositivo con una app. El proceso es rapidísimo: basta con descargarla, abrirla y seguir los pasos; algo que no lleva más de un minuto.
En ella se muestran, en primer lugar, todos los dispositivos instalados. Al seleccionar uno, se accede a una gráfica con los datos de los últimos 7 días tanto de la concentración de CO2 como de temperatura, humedad y presión atmosférica (este último no se ve directamente desde el dispositivo).
Del mismo modo, se pueden realizar algunos ajustes para que, por ejemplo, llegue una alerta al móvil al alcanzar un nivel de CO2 concreto, o personalizar cada cuánto tiempo se deben actualizar los datos.
¿Por qué es importante el CO2?
Teniendo en cuenta esta medición, se puede saber si la ventilación es adecuada y suficiente y, por lo tanto, se reducen inconvenientes como que los estudiantes pasen frío durante las horas de clase por tener las ventanas abiertas demasiado; o que aumente el riesgo de contagio cuando no es una ventilación cruzada y permanente. Y no solo eso: los niveles altos de CO2 también influyen negativamente en la salud (congestión nasal, enfermedades respiratorias, dolor de cabeza) y en la concentración, tal y como recogía Lo explica María Rosa Sastre, licenciada en Ciencias Ambientales, docente y miembro del grupo VentilANDo, en un artículo publicado en nuestra web.
Las alternativas
Los científicos y especialistas recomiendan que los medidores que se empleen en aulas y cualquier otro espacio interior sean de tipo NDIR (non-dispersive infrared; infrarrojo no dispersivo), como el Aranet 4 Home, frente a otras tecnologías. En este artículo podéis ver algunas alternativas.
from EDUCACIÓN 3.0 https://ift.tt/39SZMFL
via IFTTT
EmoticonEmoticon