El uso de materiales interactivos en clase enriquece la enseñanza, hace que los estudiantes se muestren más motivados e interesados y participen más en las clases. Por eso, Dexway incorpora este tipo de contenidos en sus cursos de formación. Para ello, además, aprovecha la popularización de las tabletas en el entorno educativo y facilita extensiones digitales y cursos de idiomas blended learning. Combinados con las plataformas escalables LMS o LCMS de Voluxion, ofrecen funciones especializadas en idiomas como la Comunidad de estudiantes Dexway.
Las estrategias
Para dotar de interactividad la enseñanza, Dexway pone en práctica algunas estrategias interactivas de aprendizaje que tienen a la tecnología y las extensiones digitales como protagonistas.
1. Ejercicios interactivos
Las clases pueden ser mucho más dinámicas si los profesores se apoyan en extensiones digitales con ejercicios interactivos. En el caso de los cursos de idiomas Dexway, estos ejercicios van desde emparejar conceptos a rellenar huecos, resolver un crucigrama u ordenar las palabras de una frase.
Así, los cursos Dexway Classroom Companion son extensiones digitales especialmente desarrolladas para operar dentro y fuera de la clase según las preferencias del docente. Gracias a su interactividad, se convierten en una forma eficaz de proponer ejercicios variados y amenos que permiten que los alumnos se diviertan mientras aprenden con el método ‘learning by doing’ (aprender haciendo) de Dexway.
2. Subir contenido a comunidades online
Los estudiantes son bastante activos en redes sociales como Twitter, Facebook o Instagram y es posible aprovechar las dinámicas de estas redes para actividades más productivas llevándolas al terreno de lo educativo y didáctico.
Dexway propone comunidades de alumnos donde recrear las bondades de una red social pero en un entorno seguro, controlado por los profesores y guiado con fines educativos. De esta manera, las comunidades Dexway (privada o global) permiten abrir debates o participar en grupos de conversación con audio y vídeo.
3. Aula invertida
La metodología de aula invertida o Flipped Classroom es una de las más utilizadas para dinamizar las clases y hacerlas más interactivas y participativas. Gracias a ella, los alumnos estudian en casa las lecciones señaladas por el profesor y las horas en el aula se emplean para ejercicios interactivos, actividades prácticas y resolución de dudas.
El aula invertida ayuda a respetar los tiempos de aprendizaje de los diferentes perfiles de una clase, sobre todo en la formación de idiomas, donde los conocimientos no suelen ser uniformes. Esto se debe a que, además de la educación reglada, el nivel personal de cada alumno depende de otros factores como sus lecturas, sus viajes, que vea películas o series en versión original…
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